A una hora aproximada del bullicio en Tetuán y a las espaldas de la irreconocible Xaouen por la presión turística se puede acceder a un puñado de rutas a pie en búsqueda de los picos del Lacraa, el Tissouka o el Kelti. Estas son las montañas que coronan el bosque del pinsapar, un tipo bosque que solo se podrá encontrar en la Sierra de Cádiz y allá por Rusia. Asoman las kabilas, pequeñas aldeas conectadas por caminos en un paisaje prácticamente calcado a las cordilleras de Andalucía en cuanto a geología y vegetación, y asoman a su vez las colonias de macacos salvajes, recordando que ésto sí es territorio africano, de sabor mucho más intenso y nada edulcorado.
Recomendable la ascensión al techo del Talasemtanne en 4x4 con Brahim al volante, organiza viajes por la zona, familiar de quienes llevan el refugio de Affaska.
Back to Top